Londres está en movimiento. Su presa podrías ser tú...

Londres es una ciudad sobre ruedas: una ciudad como nunca habías visto. Tras la terrible Guerra de los Sesenta Minutos, las ciudades que sobrevivieron al apocalipsis se convirtieron en depredadoras, persiguiendo a ciudades menores y alimentándose de ellas.

Londres es una de ellas y se encuentra a la caza de una pequeña urbe, cuando Tom se topa con una joven asesina. Ambos acabarán en la Región Exterior, un páramo desolador marcado por las huellas de las ciudades ambulantes. Este es el comienzo de una gran aventura para estos dos chicos, que tendrán que aliarse para poder sobrevivir.

Máquinas mortales nos introduce en un mundo futurista donde las máquinas son instrumentos de poder y la religión es la tecnología. En este mundo, el joven Tom, que nunca ha salido de Londres, se convertirá en un héroe que, tras verse alejado de su ciudad y de su amiga Katherine, luchará para conseguir que su urbe se salve de una destrucción inminente.

El libro que traigo el día de hoy llega a Chile por Me gusta Leer Chile, pertenece a la editorial Alfaguara (también conocida como la editorial de mis pesadillas), es tapa blanda, las hojas son normales y tiene un total de 368 hojas. 

Ok, hoy vengo a hablar de una especie de drama lector que me pasó con este libro. Comencé a leerlo entusiasmada, podía ser mi reencuentro en gloria y majestad con la ciencia ficción pero, a la mitad ya me tenia algo perdida. 

Contextualicemos. El libro nos lleva a un futuro distopico, en el que después de una extraña guerra las ciudades tienen ruedas (olvidemos el concepto de Estado-Nación), literalmente tenemos ciudades gigantes y monstruosas que andan sobre la tierra devorando ciudades/asentamientos más pequeños en búsqueda de recursos para subsistir.

El protagonistas se llama Tom, es un joven huérfano londinense que sueña con ser historiador pero las circunstancias de la vida se lo impiden, un día, en medio de este apocalíptico mundo steampuck (amado steampunk) en el que Londres está en camino a devorar un asentamiento, se escapa de su trabajo en el museo y en medio de caóticas circunstancias termina conociendo a su héroe de toda la vida, a una extraña/misteriosa chica llamada Hester y cayendo con ella desde la inmensidad de Londres a los paramos desiertos en los que corren las ciudades. 

La misteriosa asesina Hester y Tom deben hacer equipo para sobrevivir y poder volver a Londres y evitar que ocurra una desgracia, todo mientras van desenmarañando secretos de esta extraña sociedad en la que viven. 

Tengo una extraña sensación con el libro. Comencé a leerlo en medio de toda esta pandemia (llevamos encerrados desde el 15 de marzo) con la esperanza de engancharme y pasó lo contrario. Al principio iba bien, la premisa me atrapó, la manera en que estaba organizada la sociedad  (con el papel casi religioso de la tecnología) me pareció fascinante, al igual que la sociedad organizada como en castas. El problema fue Tom, me costó profundamente empatizar con él, el personaje no me logró convencer desde un principio, su desarrollo tampoco, no es como esos libros en los que al principio me cae mal alguien y después en el transcurso del libro va mejorando, aquí tuve problemas desde el principio. Hester por su parte me pareció un personaje interesante, me gustó bastante y la verdad si no abandoné el libro a la mitad fue por ella, mentalmente imaginaba 1000 ilustraciones de ella, me gustó. 

La trama fue otro problema, la primera mitad del libro me gustó, pero después todo me parecía igual: una constante persecución que en ocasiones me parecía algo plana. Los personajes secundarios interesantes, al igual que el villano. En realidad no es un mal libro, tal vez al ser el inicio de una trilogía me pareció algo lento, espero más adelante leer los siguientes libros, porque en mi calidad de compradora encerrada impulsiva compré tres libros en oferta y PLANEO de aquí a fin de año leerlo. 

• La creación de los personajes en características físicas es interesante, al igual que el mundo que nos presenta. Imaginar los paisajes es un gusto, me encantó.

• Me costó conectar con el protagonista. 
• La historia en ocasiones se hacia plana.

XoXo

Natalia